El objetivo de este post es daros a conocer un poquito una afición que tiene a mis amigos y a mi familia pensando: ¿es que esto no se acaba nunca? xD En realidad, el resumen de esta entrada es que yo estoy un poco loca, pero eso ya lo sabíais de antes, así que, ¿qué tal si hablamos de patinaje artístico un rato? ;)
A ver, básicamente hay muchas categorías y deportes de patinaje sobre hielo (esto es un mundo!), pero el patinaje artístico digamos que incluye cuatro: danza sobre hielo, parejas, masculino individual y femenino individual. Y cada competición se divide en tres partes: programa corto, programa libre y programa de exhibición, este último ya sin la presión de los jueces y sólo para el disfrute de los espectadores. Como yo no tengo todo el tiempo del mundo, mi mayor "conocimiento" se centra en las individuales y un poco en la danza, por lo que son en esos patinadores en los que centro mi atención durante las pruebas :P Las citas más importantes son el Campeonato Europeo, el Mundial, el Torneo de los Cuatro Continentes (como el europeo pero para el resto de países) y el Grand Prix, eso cuando no hay Olimpiadas de Invierno que me temo que no volveremos a ver hasta 2022 :S
¿Os va bullendo el cerebro? Eso es que vamos bien jajajaja Puede parecer mucho, sobre todo cuando empiezas a meterte en todos los detalles sobre este deporte, así que ¿por qué me metí en este berenjenal?
Yo ya lo conocía de pequeña. Junto con la gimnasia rítmica, la natación sincronizada, entre otros, siempre han sido deportes que mi madre y yo nos sentábamos a ver, especialmente cuando había Olimpiadas. Supongo que siempre me han llamado la atención porque, más allá del requerimiento físico que demanda, los programas son bonitos de ver. Algunos por elegantes, otros por divertidos, dramáticos... todos tan distintos y originales y... no sé, no hace falta saber de técnica para que te llegue a la patata :P (y creedme que algunos te llegan muy hondo a la patata...)
Ahora bien, yo pasé de saber de la existencia esporádica de este deporte a empezar a seguirlo por varios referentes que os explicaré a continuación y que actuaron de catalizadores para que se convirtiera en el crush que es para mí en este momento jajaja.
El primero, un libro: "Tan solo un segundo" de Virginia S. Mackenzie, una novela que se centra en la vida de Hannah, una patinadora de danza sobre hielo. La propia Hannah describe el deporte de la siguiente forma:
"Un patinador artístico y de danza necesita la rapidez de un patinador de velocidad, la fuerza de un jugador de hockey, la flexibilidad y el equilibrio de un gimnasta, la elegancia de un bailarín, la resistencia de un corredor de fondo..."
Sin duda este libro, aparte de tener una historia de amor preciosa (de verdad, preciosa), está muy bien documentado en cuanto al mundo del patinaje y te hace querer adentrarte en todos sus secretos. De hecho, fun fact, algunos de los programas que se describen en la novela, existen de verdad :P (debería hacer una entrada dedicada a eso...¿os gustaría? jaja)Después, llegó la catarsis absoluta cuando, con el gusanillo del patinaje ya en mis tripas, me decidí a ver "Yuri on ice", que para quien no lo sepa es el mejor anime de toda la historia, ¿vale? Es que es pensar en él y se me llena el corasao de sentimientos, joder. Cuenta la historia de Yuri, un patinador japonés que está pensando en retirarse de la competición después de acabar último en la final del Grand Prix. Todo cambia cuando llega a su vida Víctor, su ídolo, que se ofrece a ser su entrenador. Mientras espero a que me saquen la segunda temporada, Yuri on ice fue lo que definitivamente me enamoró y me devolvió una pasión que ni siquiera conocía hacia este deporte. En definitiva, me animó a ponerme al día, aprenderme los saltos, las reglas, a los patinadores y, en resumen, dejarme llevar por este mundo...
Todo esto está muy bien, pero hay algo o, mejor dicho, alguien que me inspiró y me llenó de orgullo y que llegó a mi conocimiento cuando consiguió su segundo mundial en Boston en 2016: Javier Fernández. El patinador español que es doble campeón del mundo, siete veces consecutivas (consecutivas!!) campeón de europa y medallista olímpico. Él es el que ha puesto al patinaje artístico sobre el mapa en mi país. De verdad, yo no sé por qué no se ha llevado aún el Premio Princesa de Asturias al Deporte... Pero él y otros patinadores demuestran que España también en el hielo tiene mucho que decir y mucho que ofrecer.
No en vano estas navidades pude asistir a su espectáculo "Revolution on ice" en Madrid y salí creyéndome todavía en un sueño. Esto es todavía más relevante porque no estaban siendo unos días fáciles para mí y mi familia y, sin embargo, Javier y el resto del equipo consiguieron que me emocionara, que gritara y llorara como nunca. Así que sí, magia es la palabra que mejor lo describe.
Os seré sincera, no sé si esto es una moda pasajera que se deshará en mi cerebro en unos años o si en el futuro seguiré disfrutando con la misma pasión de cada una de las competeciones, pero estoy más que dispuesta a aprovechar estos momentos siendo feliz y una fan loca al mismo tiempo. Porque cuando perdemos la ilusión... ¿qué nos queda?
No me quiero despedir hoy sin agradecer a tdp por seguir apostando por deportes minoritarios y a Paloma del Río y Susana Palés por ser las mejores comentaristas que una podría desear :)
En fin, podéis esperar más entradas hablando de patinaje, pero creo que por hoy es suficiente jajaja Es como si acabara de escribir la introducción de una serie nueva... ¿me acompañaréis? xD
Hasta pronto!!
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